
¿Qué coste tiene un buen arquitecto en Algeciras, Cádiz?
Esta es seguramente el interrogante clave: ¿cuánto puede valer tener un profesional con las cualidades indicadas? Esta es la pregunta del millón y es seguramente la que más le interesa. Sin embargo, esta pregunta no es tan fácil de contestar.
Lo cierto es que no hay un precio fijo. Generalmente, se cobra un porcentaje sobre el P.E.M. (Presupuesto de Ejecución de Material) y este porcentaje es variable y oscila entre el 3 por ciento y el 12 por ciento .En realidad, el P.E.M. no es más que el importe de los costes de material y mano de obra necesarios para completar el trabajo.
Como es lógico, está regulado y es información disponible para cualquier persona interesada. Específicamente, se rige por los artículos 67 y 68 del Reglamento General de Contratación Pública. Puede consultarlos aquí.
Por norma general, El P.E.M. depende de una serie de factores, entre ellos los siguientes:
- Género de propiedad
- Superficie (m2)
- Calidad a instalar
- Dificultad de construcción
Tras todas y cada una estas cifras y porcentajes, seguramente se pregunte: ¿qué significa todo esto?
Para que te hagas una idea, el arquitecto técnico más barato que puedes localizar acostumbra a costar unos 8.000 euros. Esta cantidad puede alcanzar valores de cerca de 20.000 euros en dependencia de la profesión.
No obstante, hay que recordar que se trata de valores estimados para trabajos con un enorme presupuesto. Asimismo, según la Ley 25/2009, de 22 de diciembre, por la que se altera, entre otras muchas, la Ley de Colegios Profesionales, no es posible establecer tarifas orientativas de honorarios, con lo que mientras en algunos casos el porcentaje del P.E.M. determinará el coste, en otras situaciones el coste puede cambiar.
Aspectos destacados del P.E.M.
El presupuesto de ejecución material se utiliza para fijar el costo de la obra de forma justa y equilibrada.
Por poner un ejemplo, el costo de la licencia de obras es un porcentaje del P.E.M., como los honorarios del arquitecto técnico que inspeccionará el proyecto.
El P.E.M. se consigue multiplicando la medida por el costo unitario de cada unidad de obra.
Es importante apuntar que el costo de las unidades de obra se aúna en términos de capítulos, y que estos capítulos se refieren a los diferentes oficios que intervienen en exactamente la misma unidad.
Por servirnos de un ejemplo, es habitual contar el capítulo de movimiento de tierras, albañilería, carpintería, vallado, pintura, instalación eléctrica, etcétera
Luego, sumando todos los episodios de la obra, se obtiene el presupuesto para efectuar el material.
Desavenencias entre arquitecto y aparejador
Es un error común confundir los dos roles, y en este post discutiremos escuetamente las diferencias. La figura del aparejador no existe en todos los países, como España.
El aparejador es conocido por muchos otros nombres, como arquitecto, ingeniero civil o incluso topógrafo.
En general, el arquitecto es el director de obra y el aparejador es el directivo de obra, pero esto puede variar. Las 2 funciones semejan ser la misma, pero no lo son. Lo veremos ahora.
El papel del aparejador es inspeccionar completamente la obra para garantizar la adecuada ejecución de lo que el arquitecto ha previsto en términos de cantidad y calidad.
El arquitecto técnico, por su lado, es quien ejecuta el proyecto de acuerdo con la normativa, y durante sus visitas a la obra, se cerciorará de que esta se realice conforme con la normativa. Intentará encontrar cualquier error o bien discrepancia en el proyecto.
¿En qué situación necesito un arquitecto?
Volveremos a charlar de esto con más detalle en los siguientes artículos. Asimismo varía según el país en el que se halle.
En el caso de España, existen 2 tipos de licencias: para grandes obras y para pequeñas obras, que cambian tenuemente en función del municipio. Por esta razón, le aconsejo que consulte primero con su ayuntamiento. Para resumir:
Las obras menores son las de menor complejidad técnica y, por lo general, de menor valor económico. No requieren un proyecto de construcción, sino más bien solo la aprobación del municipio. Por consiguiente, no es necesario que un arquitecto apruebe el proyecto, ni tampoco un visado del Colegio de Arquitectos. Pero esto no significa que no pueda contratarlos o bien cuando menos pedirles consejo. Este género de obras son las que :
- No mudar el uso de la vivienda
- No alterar los elementos comunes del edificio
- No modifique los elementos estructurales ni aumente las cargas para las que se han diseñado las estructuras.
- No modifique los elementos de fontanería y ventilación.
- No alterar el aspecto exterior de las edificaciones.
El trabajo mayor sería el resto. O sea, nuevas construcciones, ampliaciones, reformas que afecten a la estructura, la fontanería o los elementos de ventilación. Para ello se requiere una licencia de obras y un proyecto aprobado por el Instituto de Arquitectos. Por este motivo, debe contratar a un arquitecto o bien a un técnico con los conocimientos necesarios.
Arquitectura y diseño de interiores
Como decimos, la capacitación en diseño de interiores es uno de los pilares de la enseñanza del diseño de interiores. De hecho, es habitual que estos profesionales se especialicen en un empleo o bien estilo arquitectónico o decorativo.
Por poner un ejemplo, algunos arquitectos se especializan en la rehabilitación residencial, al tiempo que otros se centran en el uso institucional. También, ciertos tienen experiencia en la adaptación de edificios industriales y otros se centran en la adaptación de viejos edificios religiosos.
Estos son algunos de los estilos más triunfantes en este momento. ¿Cuál es su estilo favorito?
Decoración de plantas
Estrechamente relacionado con la vuelta a la naturaleza y la decoración orgánica, este estilo se basa en el uso de plantas como elementos ornamentales. La instalación de jardines verticales no solo añade un toque estético, sino asimismo mejora la calidad del aire. Además de esto, puedes jugar con los aromas y los colores y dar al edificio un aspecto natural.
La arquitectura verde también emplea tejados verdes y cubiertas de suelo que requieren poco mantenimiento y moderan la temperatura y la humedad. En definitiva, se trata de una tendencia ecológica, llamativa y útil; claro que para esto hay que aprender de jardinería y botánica.
Arquitectura industrial
En el otro lado de la balanza está este estilo del mismo modo popular. Históricamente, se identifica por la primacía de la utilidad. Por este motivo, emplea líneas fáciles, colores básicos y grandes superficies. Hoy en día, existe una extensa gama de materiales y acabados que dejan dar brida suelta a la imaginación en el momento de diseñar las habitaciones.
Este estilo se usa con frecuencia en lofts y salas para reuniones o fiestas. Impresiona el empleo de escaleras metálicas y grandes ventanales, vigas y contrafuertes metálicos y espacios abiertos. También hay mucho juego en lo que se refiere a la iluminación, lo que explica su elección en los centros escénicos.
Arquitectura tradicional
Esta línea ornamental incluye en realidad varios subgrupos. Se basa en la tradición del coleccionismo, que genera espacios integrados en la cultura colectiva. Puede usarse, por poner un ejemplo, en el diseño de casas de campo o bien zonas gastronómicas.
Destacan las decoraciones mediterráneas, rurales o moriscas. El empleo de elementos locales es parte integrante de una filosofía de kilómetro cero, y se acostumbran a volver a usar piezas locales, como piedras de molino, mesas de tala o bien herramientas agrícolas.
Resumiendo, el diseño de interiores es una especialidad poco a poco más pedida. Ya sea por su peso humanístico en la conservación de edificios en ciudades densamente pobladas, por la resignación que aporta a los espacios o para preparar a los diseñadores de interiores, estos profesionales admiten cada vez más encargos.