¿Cuánto cuesta un arquitecto en Cisneros, Palencia?
Aunque no podemos darle cifras precisas, es posible darle ciertas estimaciones a fin de que se haga una idea de lo que cuesta un arquitecto técnico en España.
En nuestros días, ciertos arquitectos cobran entre 8.000 y 10.000 euros por un proyecto residencial nuevo. Los profesionales más experimentados y cotizados pueden cobrar entre 20.000 y 24.000 euros. En su interés, le recomendamos que no busque ni admita tarifas más bajas que las acá citadas. Al intentar esto, puede pensar que está ahorrando dinero, pero la verdad es que seguramente le costará mucho dinero porque el arquitecto seguramente no va a trabajar con la debida diligencia y esto afectará en gran medida al resultado final.
Probablemente se escandalice cuando vea estas cantidades, pero lo cierto es que estas cantidades se han manipulado desde que existen las balanzas y no se consideraban absurdas o exageradas entonces.
Además de esto, tienes que saber que el trabajo de este profesional es muy complejo por el hecho de que tiene que asegurarse de que todo salga bien para no perder tiempo, recursos o dinero. Otra cosa que casi nadie sabe es que el arquitecto técnico es el mayor responsable de la ejecución del proyecto. Tiene la obligación de contratar una póliza de seguro de responsabilidad civil por 10 años, que tiene que pagar durante los próximos 10 años. Esto se incluye en el cálculo de sus honorarios.
Resumiendo, estos honorarios incluyen la realización del anteproyecto, el diseño básico, pero también la ejecución y dirección de la obra.
Aspectos fundamentales del P.E.M.
El presupuesto de ejecución material se utiliza para fijar el coste de la obra de forma justa y equilibrada.
Por servirnos de un ejemplo, el precio de la licencia de obras es un porcentaje del P.E.M., como los honorarios del arquitecto que supervisará el proyecto.
El P.E.M. se obtiene multiplicando la medida por el precio unitario de cada unidad de obra.
Es esencial indicar que el coste de las unidades de obra se aúna en concepto de episodios, y que estos episodios se refieren a los diferentes oficios que intervienen en la misma unidad.
Por servirnos de un ejemplo, es habitual enumerar el capítulo de movimiento de tierras, albañilería, carpintería, vallado, pintura, instalación eléctrica, etc.
Entonces, sumando todos los capítulos de la obra, se consigue el presupuesto para realizar el material.
¿Qué hace a un buen arquitecto?
Como ya hemos citado, la calidad del profesional que contrate es algo que debe valorar por adelantado. En este sentido, podemos encontrar múltiples cualidades que nos permiten reconocer el valor de un arquitecto técnico.
Para este artículo, hemos escogido los que consideramos más esenciales y que seguramente le van a ser útiles:
- Compromiso con el cliente del servicio y capacidad de comunicar su opinión: un buen arquitecto debe ser capaz de contestar a las necesidades del usuario y de aconsejarle sobre el proyecto que desea efectuar.
- Interpretación de los espacios: ha de ser capaz de crear espacios que respeten la funcionalidad deseada y también la sensibilidad de las personas que los habitan.
- Obsesión por el detalle: es preciso entender cada proyecto como algo único y buscar un resultado óptimo en cada parte.
- Creatividad: es esencial tener la capacidad de presentar diferentes propuestas de diseño al cliente. Es cada vez más importante crear un buen plan de marketing a fin de que los arquitectos den a conocer sus diseños.
- Visión de futuro: debe comprender que el género de producto que ofrece está desarrollado para durar.
Arquitectura y diseño de interiores
Como decimos, la capacitación en diseño de interiores es uno de los pilares de la enseñanza del diseño de interiores. En verdad, es habitual que estos profesionales se especialicen en un uso o bien estilo arquitectónico o ornamental.
Por poner un ejemplo, ciertos arquitectos se especializan en la remodelación residencial, mientras que otros se centran en el uso institucional. Además, ciertos tienen experiencia en la adaptación de edificios industriales y otros se centran en la adaptación de viejos edificios religiosos.
Estos son algunos de los estilos más triunfantes en este momento. ¿Cuál es su estilo favorito?
Arquitectura de plantas
Estrechamente relacionado con la vuelta a la naturaleza y la decoración orgánica, este estilo se fundamenta en el empleo de plantas como elementos ornamentales. La instalación de jardines verticales no sólo añade un toque estético, sino que asimismo mejora la calidad del aire. Además, puedes jugar con los aromas y los colores y dar al edificio un aspecto natural.
La arquitectura verde también usa tejados verdes y cubiertas de suelo que requieren poco mantenimiento y moderan la temperatura y la humedad. En suma, se trata de una tendencia ecológica, llamativa y útil; claro que para esto hay que aprender de jardinería y botánica.
Decoración industrial
En el otro lado de la balanza está este estilo del mismo modo popular. Históricamente, se identifica por la primacía de la utilidad. Por esta razón, utiliza líneas fáciles, colores básicos y grandes superficies. Hoy día, existe una amplia gama de materiales y acabados que dejan dar brida suelta a la imaginación en el momento de diseñar las habitaciones.
Este estilo se utiliza frecuentemente en lofts y salas para asambleas o bien fiestas. Impresiona el empleo de escaleras metálicas y grandes ventanales, vigas y contrafuertes metálicos y espacios abiertos. También hay mucho juego en cuanto a la iluminación, lo que explica su elección en los centros escénicos.
Arquitectura tradicional
Esta línea decorativa incluye realmente varios subgrupos. Se basa en la tradición del coleccionismo, que genera espacios integrados en la cultura colectiva. Puede emplearse, por servirnos de un ejemplo, en el diseño de casas de campo o bien zonas gastronómicas.
Destacan las decoraciones mediterráneas, rurales o moras. El empleo de elementos locales es parte integrante de una filosofía de quilómetro cero, y se acostumbran a reutilizar piezas locales, como piedras de molino, mesas de tala o herramientas agrícolas.
Resumiendo, el diseño de interiores es una especialidad cada vez más pedida. Así sea por su peso humanístico en la conservación de edificios en ciudades densamente pobladas, por la resignación que aporta a los espacios o bien para preparar a los diseñadores de interiores, estos profesionales admiten poco a poco más encargos.