
¿Qué coste tiene un arquitecto en Torrecampo, Córdoba?
Veamos el presupuesto medio de los servicios de un arquitecto técnico.
En el mercado de España, el coste medio de un arquitecto fluctúa entre el 3 por ciento y el 12 por ciento del P.E.M. En un proyecto de 200.000 €, el porcentaje de los honorarios del arquitecto sería del 7 por cien , y el presupuesto del arquitecto técnico sería de 14.000 €.
A primer aspecto, es posible que estos costos no sean lo que esperabas, o incluso te parezcan un poco desorbitados, mas ten en cuenta que se trata de un monto que incluye no sólo al profesional, sino asimismo todo lo que implica. Teniendo esto en cuenta, también debemos hacer una evaluación:
- Las horas y la dedicación dedicadas a su proyecto.
- Los gastos que le causará el ejercicio de su profesión: seguros, gastos de autónomo, etcétera ….
- La formación con la que podrá cumplir su misión.
- La responsabilidad que adquiere con usted, el cliente: debe ofrecer una garantía de 10 años en relación con los posibles daños que puedan afectar a la estructura del edificio y de 3 años por incumplimiento de los requisitos de habitabilidad o bien funcionalidad.
La cuestión de la responsabilidad que terminamos de mentar es un elemento que evidentemente hace que el precio de la contratación de un arquitecto sea bastante elevado. Tiene su disposición concreta en la Ley de Ordenación de la Edificación.
Si desea tener un conocimiento más completo de dicha Ley, puede consultarla. En cualquier caso, es importante comprender que cualquier reforma, rehabilitación o bien obra es una labor de gran extensión y requiere un elevado nivel de especialización por la parte del profesional.
Además de esto, suelen ser obras con las que el cliente del servicio tiene una relación especial y, por consiguiente, precisan de una persona que comprenda todas estas circunstancias y ponga todo su conocimiento al servicio del proyecto para conseguir el mejor resultado.
Evidentemente, no podemos saber qué idea o bien motivación te ha llevado a este artículo, en tanto que el número de proyectos diferentes es casi infinito (una reforma, la separación de la casa, etcétera). No obstante, esperamos que esta información le haya sido útil y que podamos ayudarle a encontrar un buen arquitecto técnico que ejecute el proyecto de la mejor manera posible.
¿Qué comisión del P.E.M. se lleva al arquitecto?
El porcentaje puede cambiar entre el 8 y el 12 por ciento en la mayor parte de los casos, en dependencia de la naturaleza del proyecto. Antes era menos complicado conocer los honorarios del arquitecto técnico pues había un sistema de baremos.
No obstante, en la actualidad no hay ningún sistema de referencia o bien guía para acotar el importe de los honorarios de un arquitecto técnico, lo que complica la obtención de una cantidad precisa.
Si bien es buen sistema de referencia para calcular estas tasas, asimismo puede jugar en su contra. Date cuenta de que siendo proporcional, el arquitecto puede estar más interesado en que tu proyecto sea lo más costoso posible. Por fortuna, los arquitectos éticos y profesionales no persiguen este interés. Asesoran a sus clientes en función de sus necesidades y, en ocasiones, no vinculan sus honorarios al P.E.M., sino que los basan en el trabajo efectuado.
No obstante, es importante tener en cuenta que los costos son en un inicio estimaciones, en tanto que pueden variar mucho en función de los próximos factores:
- El género de casa: ¿es una casa unifamiliar o bien adosada?
- La superficie de la casa, es decir, los metros cuadrados.
- Las calidades que va a tener (este factor incide directamente en el costo del metro cuadrado).
- El nivel de dificultad del trabajo: ¿es un trabajo de nivel bajo, medio o bien alto?
Diferencias entre arquitecto y aparejador
Es un error común confundir los dos papeles, y aquí discutiremos brevemente las diferencias. La figura del aparejador no existe en todos los países, como España.
El aparejador es conocido por otros muchos nombres, como arquitecto, ingeniero civil o incluso topógrafo.
Normalmente, el arquitecto técnico es el director de obra y el aparejador es el directivo de obra, pero esto puede variar. Las 2 funciones semejan ser la misma, mas no lo son. Lo vamos a ver ahora.
El papel del aparejador es supervisar completamente la obra para garantizar la adecuada ejecución de lo que el arquitecto técnico ha previsto en términos de cantidad y calidad.
El arquitecto, por su parte, es quien ejecuta el proyecto de acuerdo con la normativa, y a lo largo de sus visitas a la obra, se asegurará de que esta se realice conforme con la normativa. Procurará encontrar cualquier fallo o bien discrepancia en el proyecto.
¿Cuándo necesito un arquitecto?
Volveremos a charlar de esto con más detalle en los siguientes artículos. Asimismo varía según el país en el que se halle.
En el caso de España, existen 2 tipos de licencias: para grandes obras y para pequeñas obras, que cambian levemente en función del ayuntamiento. Por ello, le recomiendo que consulte primero con su municipio. Para resumir:
Las obras menores son las de menor dificultad técnica y, en general, de menor valor económico. No requieren un proyecto de construcción, sino solo la aprobación del municipio. Por tanto, no es preciso que un arquitecto apruebe el proyecto, ni tampoco un visado del Instituto de Arquitectos. Pero esto no quiere decir que no pueda contratarlos o por lo menos pedirles consejo. Este género de obras son las que :
- No mudar el uso de la residencia
- No alterar los elementos comunes del edificio
- No modifique los elementos estructurales ni aumente las cargas para las que se han desarrollado las estructuras.
- No modifique los elementos de fontanería y ventilación.
- No alterar el aspecto exterior de los edificios.
El trabajo mayor sería el resto. O sea, nuevas construcciones, ampliaciones, reformas que afecten a la estructura, la fontanería o bien los elementos de ventilación. Para esto se requiere una licencia de obras y un proyecto aprobado por el Instituto de Arquitectos. Por este motivo, debe contratar a un arquitecto técnico o bien a un técnico con los conocimientos precisos.
¿Qué hace un diseñador de interiores?
Los arquitectos de diseño de interiores son previsores y sienten curiosidad por las nuevas tendencias sociales, los materiales y las tecnologías. El diseño de interiores debe ver con las personas. Aquí se observa, hasta el más mínimo detalle, a armonizar personas, objetos y espacios. De esta manera, puede influir de forma positiva en la vida de las personas.
A lo largo de su formación, establece la conexión entre las necesidades de las personas y las cualidades de los espacios. Te preguntas cómo puedes emplear mejor los espacios para ofrecer una nueva perspectiva y de qué manera la gente experimenta tus creaciones. La luz, el color, la forma, la textura, el mobiliario, los materiales, el tiempo, el sonido, todo ello desempeña un papel. El diseño va alén de la funcionalidad.
En el momento en que un arquitecto de interiores tiene una psique abierta y una visión de las personas y la sociedad, es imaginativo y está repleto de arte y ciencia, arquitectura y diseño, tecnología, historia y personas. Animan a mirar el ambiente de forma crítica y con un sentido innato del estilo.
Se sugiere que un arquitecto de interiores ha de ser capaz de escuchar atentamente para meterse en la mente de su cliente. Esto le permite entender sus necesidades, sueños y modo de vida. Los arquitectos de interiores también deben conocer los códigos de construcción federales, estatales y locales para que sus diseños estén al día.
Los diseñadores de interiores son parte del proceso de construcción o renovación de principio a fin. Empiezan su trabajo reuniéndose con el cliente del servicio para hablar de las expectativas del proyecto.
Basándose en sus conocimientos y credenciales, desarrollan un término en estado embrionario, examinando los tejidos, la iluminación, el entorno, los colores y el moblaje para formular un concepto sólido. Naturalmente, todo esto tiene que ajustarse al presupuesto.
En muchos cursos se enseña a los estudiantes los elementos técnicos de construcción de las edificaciones, lo que ha empezado a difuminar la línea entre la arquitectura y el diseño de interiores.
El papel del diseño de interiores puede ser muy diferente. Mientras que uno puede estar más interesado en la decoración, los muebles y los proyectos pequeños, otro puede estar más interesado en proyectos más grandes que requieren habilidades técnicas, artísticas y estéticas. Estos últimos tienen más probabilidades de haber estudiado diseño de interiores.
Las necesidades cambiantes de la sociedad moderna han hecho que el papel del diseñador de interiores sea cada vez más importante. Singularmente en el campo comercial, con frecuencia se renueva un edificio desde el interior sin mudar el armazón original. Esta clase de proyecto de renovación es el reino del diseño de interiores.
El arquitecto de interiores se asocia a una figura más cercana a la del decorador de interiores, mas en realidad el diseño de interiores presta más atención a los aspectos prácticos y funcionales, como el dimensionamiento adecuado de los muebles, la atención a los pasillos y la predisposición de los muebles comodamente y funcional.
Asegúrese de que los materiales y las tecnologías son de buena calidad, de que no existen peligros potenciales para la salud de los usuarios de estos ambientes, de que la eliminación de las barreras arquitectónicas y la modernización para nuevos usos dan lugar a un buen aislamiento acústico, de que existe un buen equilibrio entre el consumo de energía y el confort y, por norma general, de que todo el entorno armoniza con el tamaño de los espacios arquitectónicos.
Por el contrario. En el campo de la decoración, un arquitecto de interiores se encarga del diseño de objetos y espacios para entornos. No solo piensa en la estética, sino también en los aspectos funcionales.
Los arquitectos de interiores con capacitación en diseño de interiores acostumbran a estar presentes y opinar en todas y cada una de las fases del proceso de construcción, desde los planos iniciales hasta los toques finales.
La práctica del diseño de interiores requiere que los arquitectos tengan presente prácticamente todos los aspectos de la construcción de un espacio interior que repercute en la habitabilidad humana, incluidos los materiales, los acabados, los requisitos eléctricos, la fontanería, la iluminación, la ventilación, la ergonomía y el empleo inteligente del espacio.